Un ejemplo seríal de las hormigas granívoras, al hacerse un reparto de los recursos sus mandíbulas se especializan dependiendo del tamaño de las semillas.
Las gallinas son animales granívoras (que comen granos) y su aparato digestivo sirve para asimilar, triturar y digerir granos y otros alimentos vegetales.
El gorrión partió de ser un ave insectívora que fue evolucionado a granívoro para poder aprovecharse de los recursos que le ofrecía vivir cerca del hombre.
Se ha clasificado el hábito alimentario del tepezcuintle como frugívoro y granívoro; sin embargo, algunos investigadores informan que consume diversos tipos de forraje.
Las palomas, aunque son fundamentalmente granívoras, se alimentan también de verduras como la lechuga y la zanahoria, que le aportan las vitaminas y carotina necesarias.