Al mismo tiempo, diversos grupúsculos inspirados por las ideologías anarquista, trotskista y maoísta, manifestaron su oposición a la sociedad capitalista y al consumismo.
Las nuevas formas de lucha demuestran la independencia no solo ideológica sino organizativa y práctica que los grupúsculos habían adquirido respecto de las tácticas tradicionales.
De lo contrario, y en nombre de la lucha contra los grupúsculos, podemos terminar reproduciendo la misma lógica aparatera y excluyente de los partidos tradicionales.